Beneficios del Qigong

Transcripción

«Nosotros tenemos un dicho: 

“Kung Fu, Kung Fu, Kung Fu como un voto de promesa, con tiempo y esfuerzo.“

Uno es capaz de aumentar su fortaleza y de mejorarse a sí mismo, sin importar si existe, o no, un problema físico o mental específico que tratar. 

Uno necesita tiempo para evolucionar como persona. 

Esto se aplica para cualquier situación que afrontemos en la vida.

De ahí que sea tan importante dedicarle una parte de nuestro tiempo diario. 

El tiempo con el que cada uno cuente; porque no existe una solución rápida y sencilla para ello. Esto no es un Kentucky Fried Chicken ni un McDonalds, y pensar así es un error.

En general, unos cinco a diez minutos de tu tiempo diario en el que muevas tu cuerpo y practiques la respiración, serán suficientes para liberar la tensión acumulada y sentirte mejor.

Vivimos en una época en la que debemos lidiar a diario con innumerables presiones sociales, y así acabamos acumulando mucha tensión física y mental en nuestro cuerpo.

Tampoco nos favorece el estilo de vida sedentario actual, en el que la mayoría de las personas ya no necesita usar su cuerpo para moverse, ni siquiera para trasladarse de un lugar a otro. Permanecemos durante demasiadas horas sentados y en una misma posición. Utilizamos nuestra mente, pero muy poco el resto de nuestro cuerpo. Y es ahí en donde se concentra el trabajo del Ziran Qigong.

De lo que hablamos aquí es de transformar nuestro cuerpo. La parte frontal en un valle vacío, inmenso y fértil; mientras la espalda se expande como si fuera una montaña gigantesca y fuerte que lo protege y sustenta.

Es la teoría del Yin y el Yang. 

Durante el momento Yin, recolectamos la energía para nutrir al valle, es decir, para que el Qi fluya en nuestro cuerpo a través de sus órganos: el corazón, los pulmones, el bazo, los riñones, el estómago, la vejiga, los intestinos… El sistema digestivo… El sistema cardiovascular y respiratorio. Todo lo que hay en nuestro cuerpo.

Al abrirla, nuestras emociones y la energía fluyen libremente. Soltamos todo.

Es como ahora: la parte que ven frente a la cámara es mi “Yo”, pero dentro de mi, también retiene mis emociones, mis egos… Mi ego masculino.  

Es mi Yo que se proyecta hacia fuera. El que manifiesta mis sentimientos, mis ansiedades… 

Cuando la desbloqueamos, es mucho más fácil que fluya el Qi en nuestro cuerpo. 

Sin embargo, si desbloquemos la parte frontal sin fortalecer la espalda, el resultado sería como el de tener un valle desprotegido porque no se cuenta con una montaña fuerte que lo sustente.

Para explicarlo nosotros utilizamos una metáfora de   

“construir la estructura y crear el espacio vacío”.

La estructura es la fuerza. El poder. 

El espacio vacío es lo que se usa.

Es lo mismo con nuestro cuerpo.

Esta es mi idea a la hora de entrenar. 

La columna vertebral sostiene nuestra estructura y el sistema nervioso. 

Por lo tanto, la salud de nuestra espalda es vital para nuestro bienestar.

Además, he creado una teoría:

“Las tres alas del Fénix y la esencia del Dragón”. 

Esta teoría consiste en abrir la pelvis como si fueran “las alas de tu esencia”. Abrir los omóplatos como si fueran “las alas de tu Qi (energía vital)”.

Abrir el hueso temporal como si fueran “las alas tu espíritu”. 

Y una vez abiertos, las tres alas abrazan al cono central, vacío. 

Envuelven el Qi para que el Dragón vuele.

Mi teoría se basa en la filosofía china, en la Medicina Tradicional China (MTC), en el entrenamiento del Qi Gong y en la anatomía del cuerpo humano.»

En este vídeo filmado en el Zócalo de Ciudad de México (2019), el Maestro detalla su teoría y la comparan con otra ancestral, la de la serpiente emplumada «Quetzalcóatl». La cosmología china y la mexicana se encuentran, convergen y se enriquecen mutuamente.

Master Liu Deming, heredero de la Tradición Liu He Zi Ran Men en 5a. Generación.